
SYM ADX 300: probamos el nuevo scooter trail para carnet A2


ASPECTOS POSITIVOS
ASPECTOS NEGATIVOS

Cilindrada

Motor

Potencia

Peso

Carnet

Precio
Desde que Honda lanzó su X-ADV los "scooter adventure" están de moda, y el éxito del ADV 350 ha impuesto esa moda entre los de carnet A2. En la preciosa Córdoba tuve la oportunidad de probar el nuevo SYM ADX 300. Un scooter crossover, trail, con aptitudes camperas o como queramos llamarlo. Cuesta 4599 euros, un precio interesante, por debajo de la barrera psicológica de los 5000 euros, además con seguro gratis y 5 años de garantía. Es su mayor argumento frente al Honda y el nuevo rey de la categoría, el Zontes 368G.
El motor es un monocilíndrico de 278 cc que entrega 26 CV a 8000 rpm y 26 Nm de valor de par máximo a 6000 vueltas. Delante lleva una rueda de 15 pulgadas y detrás de 14 pulgadas. Se detiene gracias a un disco de 260 mm con pinza radial de 4 pistones apoyado por uno trasero de 240 mm con pinza de 2 pistones, con ABS Bosch 10.3M de dos canales pero que no es desconectable. El depósito de combustible es de 16 litros con acceso delantero, lo que deberá ofrecer una gran autonomía, mientras que el asiento se encuentra a 790 mm del suelo.

SYM ADX 300
El scooter pesa 200 kg en orden de marcha y monta una pantalla TFT a color de 7 pulgadas con tres modos de presentación a elegir, modo día y noche automático y manual, pero sin conectividad. Además del precio, lo que más me gustó de este scooter es su facilidad de manejo, en parte debido a la poca distancia al suelo del asiento. Aunque esto tiene una cruz y es que, para las personas que midan más de 180 cm, el SYM ADX 300 se les puede quedar algo pequeño, en especial a la altura de las rodillas. En la prueba por las bonitas carreteras cordobesas, mis compañeros más altos me comentaban que tenían que abrir las rodillas. En cambio, para mis humildes 174 cm, el asiento estaba a una altura perfecta. Lo que no me convenció es que se trata de un asiento amplio y cómodo pero de dos alturas, con un apoyo lumbar para el piloto. Esto impide echarse más para atrás y no ayuda a la hora de transportar una bolsa encima del mismo. Debajo hay un hueco alargado en el que cabe un casco integral. Los responsables de SYM nos aseguraron que se ofrecerá como opción un baúl superior para poder llevar un segundo integral, pero no nos pudieron decir el precio de este importante componente.
Para detener el scooter se dispone de un buen equipo pero las manetas no cuentan con posibilidad de reglaje, algo que echamos de menos los que tenemos los dedos cortos. Me pareció que como mejor se detenía el SYM era usando también el disco trasero como apoyo y apretando la maneta del delantero con vigor. Por otra parte, el ASB no se mostró intrusivo.
La potencia y aceleración es más que suficiente, aunque no exhuberante, y permitía rodar con soltura, incluso adelantando cuando hiciese falta. Sé que desde el punto de vista logístico no es fácil rodar con 15 periodistas por la ciudad, pero en las pruebas de scooter ciudadanos suelo echar de menos tener la posibilidad de probar el modelo en medio de la urbe, donde pasará posiblemente el 90 por ciento del tiempo. Me habría gustado comprobar cómo se comporta sorteando coches.
Estética agresiva
En lo que se refiere al aspecto estético, pues aquí la opinión que importa es la tuya. Los gringos dicen que la belleza está en el ojo del que mira… A mí me parece un scooter agradable a la vista, con unas líneas agresivas sin caer en extremos y tres elegantes colores a elegir (blanco, gris o negro). Lleva una pantalla-parabrisas ahumada más bien pequeña y que no se puede graduar. Por suerte, la climatología fue perfecta durante la prueba pero me quedó la duda si sería un poco corta para la lluvia y en especial si el conductor es una persona más bien alta. El ADX 300 es estrecho, lo que redunda en una mejor aerodinámica aunque como contrapartida si fuese más ancho protegería algo más de las inclemencias.
La imagen de scooter trail, tan de moda hoy en día, se completa con un manillar al aire con protector de manos y unos neumáticos CST (120/70-15 y 140/70-14) de origen chino con un dibujo marcado. Los cauchos se mostraron eficaces y permitían inclinar el scooter de un lado al otro en las chicanes de la sierra cordobesa con confianza. El pasajero dispone de un cómodo espacio con una amplias asas y reposapiés escamoteables.
Los espejos de generoso tamaño, ofrecen una visión clara de lo que ocurre a nuestra espalda. A la hora de aparcar, cuenta con caballete (fácil de poner) y pata de cabra, lo que no encontrarás es el típico freno de mano que tienen algunos scooter. No falta un sistema de llave remota, algo que no sabes lo cómodo que es hasta que no lo usas. Ahora que lo pienso, confieso que no vi la llave en toda la prueba. Cada unidad tenía la llave en la guantera (donde hay dos puertos USB y USB C) y bastaba girar el mando circular que hay a la altura de las rodillas para poner en marcha el scooter, bloquearlo o abrir el hueco bajo el asiento (en nuestra unidad para cerrarlo había que apretar bien fuerte).
Gran autonomía
Soy una persona obsesiva-compulsiva y entre mis múltiples manías está la de la autonomía. Nunca he entendido por qué algunos fabricantes ofrecen depósitos de gasolina dignos de la Señorita Pepis. En este caso no es así, SYM ha optado por ofrecer 16 litros en el ADV 300, el depósito va en el bloque central entre las piernas que la marca asegura haber reforzado el chasis con el objetivo de que la parte ciclo responda sin problemas tanto en tierra como sobre asfalto (recuerda que estamos ante un scooter bipolar, capaz de rodar tanto por carretera como por campo).
En la parte trasera encontramos un doble amortiguador regulable en precarga tarado más bien blando, al igual que la horquilla. A lo largo de la prueba las suspensiones enjuagaron las irregularidades del terreno. La suavidad de las suspensiones ayudaban a que el SYM ADX 300 se mostrase cómodo sin que se comprometiese la eficacia dinámica. Solo frenando con el delantero a saco era recomendable siempre apoyarse con el trasero para que la horquilla, que tiene 125 mm de recorrido, no empezase a protestar.
Familia trail
No tuvimos oportunidad de probar el scooter por la noche pero, al menos en teoría, la iluminación full LED parece bien resuelta con 4 focos, dos a cada lado, y una especie de V dibujada por las luces diurnas (DLR -Daytime Running Lights – Luces de Circulación Diurna). Esta V es bastante llamativa y le pone cara al frontal del scooter. El piloto trasero, también de LED, cuenta con el sistema de seguridad que parpadea cuando se hace una frenada de emergencia. En las unidades de prueba éste entraba con demasiada facilidad y veías cómo parpadeaba antes de negociar un viraje el grupo óptico trasero del scooter que iba delante.
Tras la llegada del ADX 125, el ADX 300 ha sido el siguiente paso, mientras que dentro de uno meses comenzará a comercializarse el ADXTG 400 que cerrará la trilogía de scooter trail del fabricante taiwanés. ¿Te comprarías un Honda ADV 350 por 6700 euros, un Zontes 368 por 5600 euros o... el SYM por 4600 euros? La elección es tuya. En resumen, podemos decir que el SYM ADX 300 es un interesante scooter crossover que además se ofrece a un precio atractivo.
La moto al detalle...

SYM dice que la pantalla-parabrisas es "deportiva", me pareció un poco pequeña, en especial a la hora de protegernos de la lluvia o el frío.

El asiento es ámplio y cómodo y con apoyo lumbar para el pasajero, aunque a mí me gustan más los asientos corridos y no a dos alturas.

La llave remota facilita el uso, casi te puedes olvidar de la llave física. Nos gustaría verlo en todos los scooter y motos.

La instrumentación es una pantalla TFT a todo color de 7 pulgadas, con tres modos a elegir y muy legible, aunque le falta la posibilidad de poder conectar el teléfono móvil.
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Tras estudiar periodismo e inglés, en los 80 me publicaron una entrevista con Kenny Roberts y desde entonces estoy en este mundo. Dispuesto a aprender hasta la caída de la bandera ajedrezada.
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