Prueba Yamaha MT-09 Y-AMT: la primera deportiva automática

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Yamaha MT-09 2024 Y-AMT

La naked deportiva MT-09 recibió algunos cambios para este 2024 y acudimos a su presentación, en Lanzarote, de la mano de mi amigo Mariano Urdín que dio debida cuenta de las novedades técnicas y sus impresiones de la moto, y además me consta que se divirtió con ella. En resumidas cuentas, la Yamaha MT-09 recibió retoques en la posición de pilotaje y la estética (mucho mejor el frontal ahora), bomba de freno Brembo radial (bien) y electrónica con IMU y modos de pilotaje en los que podemos cambiar los parámetros avanzados (nivel de anticaballito o cuánto derrapa, etcétera). Mantiene ese estupendo motor CP3 de 890cc con 119 CV que prima la respuesta desde bajo y medio régimen a la potencia máxima, aunque arriba “corre”, el chasis doble viga de aluminio o las llantas ligeras SpinForged y un carácter general minimalista para quedarse bien por debajo de los 200 kg.

¿Qué más aporta ahora esta nueva versión Y-AMT a la MT-09? Las siglas son por “Yamaha Automated Manual Transmission” y describen bien lo que es: dos sistemas eléctricos (motor, desmultiplicación mecánica y sensores) para mover un embrague y cambio de marchas “normales”, y todo controlado por la centralita electrónica de la moto, que conoce además la actitud de ésta (acelerando, frenando, en curva o no...) y el resto de parámetros, y decide cómo actuar en función de eso y, claro, qué quiere el piloto. Solamente representan 2800 gramos de peso extra, de forma que la moto sube un poco hasta los 196 kg.

Yamaha ha añadido a la piña izquierda (que ahora va montada sobre silentblocs es decir algo elástica) una palanquita para cambiar, ha eliminado la maneta izquierda (normalmente embrague ahora totalmente automático) y también ha eliminado la palanca del pie izquierdo (a favor de ese mando en la mano del mismo lado). Aunque es irrelevante porque no hay palanca, una curiosidad es que el orden del cambio es N-1-2-3-4-5-6 (normalmente ya sabes que es 1-N-2-3-4-5-6), lógico al actuar indirectamente. Un "extra" es la Smart Key, que solo llevaba la MT-09 SP, y ahora es un aliciente en esta versión que ya está a la venta por solo 500 euros más que la normal: 11.799.

¿Cómo funciona en la práctica?

El sistema que Yamaha ha elegido añade dos modos de conducción "paralelos" a los que ya tenía la MT-09 (Sport, Street y Rain) y que siguen estando disponibles (más dos personalizables) cuando vamos en moto Manual (se selecciona desde la piña derecha incluso en marcha). En Automático es diferente y podemos elegir entre dos modos, D o D+: el primero es el más tranquilo, aunque cambia a más vueltas si abrimos más el gas, mientras el segundo (D+) es algo más deportivo, permite por ejemplo levantar un poco la rueda delantera acelerando, y deja el motor más revolucionado tanto al acelerar como al reducir.

Pero después de probarlos y hablar con los ingenieros japoneses, tengo claro que con ninguno de los modos automáticos Yamaha ha buscado un sistema muy deportivo o agresivo. Diría, si los ponemos en orden con ese criterio (deportividad), que tras el Sport (manual) estaría el Street (también manual), luego el D+ (automático), el Rain (manual) y por último y como más tranquilo el D (automático). Ojo, incluso el último permite explotar las prestaciones de la MT-09 a gusto, pero de forma menos deportiva que los demás si buscamos los límites.

En la práctica y de alguna forma, ese "Dark Side of Japan" que es el lema de las naked deportivas de Yamaha (no muy lejos del "Ready to Race" de KTM...) se disuelve un poco cuando vamos en modo automático con la MT-09 Y-AMT... Ojo, pero solo un poco, y cuando con un toque pasamos a modo manual recuperamos el genio de esta naked deportiva, muy equilibrada pero muy eficaz y rápida. De hecho, contaremos con algunas ventajas sobre una MT-09 "manual": aparte de la llave electrónica, este cambio es rápido (lo llaman "QuickShifter v3.0" y tarda 0'1 segundos en cambiar y desembragar ligeramente) y en ocasiones sí se porta como un automático.

Por ejemplo si llegamos en una marcha larga a pararnos o casi (rotonda, Stop) la moto reducirá rápidamente hasta primera o segunda aunque no toquemos la palanca, y también me dio la sensación que al reabrir gas daba un toque de embrague para ayudar a salir mejor (sin maneta yo no hubiera podido aunque quisiera). Tampoco te permite bajar marchas si vas a pasar de vueltas el motor, y a veces no te deja pasar a la siguiente marcha si lo vas a dejar muy bajo de vueltas (en manual me dejó más probar eso). Por otra parte y como ocurre en otros vehículos automáticos, en automático D  los cambios ocurren a unas revoluciones que dependen de cuánto abras gas: punta de gas se interpreta como "tranquilo" y va insertando marchas rápido (motor bajo de vueltas), gas muy abierto es lo contrario, y en D+ todavía más.

De la MT-09 no puedo añadir mucho a lo que contó Mariano en su presentación de la 2024, bueno sí que los Bridgestone S23 que monta agarran muy bien por el asfalto del pre-Pirineo catalán aunque tengamos el asfalto mojado (¡nos llovió bastante como ves en las fotos!). Es una moto ágil y fácil como buena naked deportiva, que permite aprovechar, disfrutar, de ese fantástico motor tricilíndrico CP3 que parece tener más de 119 CV por cómo empuja desde medio régimen, y que ahora con electrónica completa (e IMU) te hace sentir más seguro a sus mandos. Aunque los modos automáticos sean "tranquilos", en D+ sale como un demonio si das gas a fondo y levanta ligeramente la rueda delantera en primera y segunda... en los manuales Street y Sport, más, aunque se mantiene bajo control haciéndote creer mejor piloto.

Conclusión

Dije que Yamaha no se ha complicado (mucho) la vida y así es: su sistema permite adaptarlo a muchas motos sin gran dificultad, y de hecho apuesto a que ya para 2025 habrá una gama Y-AMT mucho más amplia que este primer modelo, no solo con este motor CP3 sino con el hermano menor CP2 de las MT07 y compañía, y quizás alguno más. Con un precio extra que me parece muy competitivo (piensa que los Quickshifter opcionales rondan 200 a 300 euros y es un sistema "tonto") permite seguir disfrutando del pilotaje deportivo como siempre, pero cambiando con la mano. No me extrañaría que hubiera una opción de palanca de pie para quien lo prefiera (Honda la tiene para sus modelos con DCT) más adelante.

En cuanto al embrague, que siempre pensé sería la "parte difícil" al hacer una moto automática, resulta que funciona muy bien y enseguida pasa desapercibido: se te olvida que haya que hacer nada con él, porque no hay que hacer nada... Habrá quien diga que hubiera sido ideal un sistema como el de Honda (e-Clutch), automático pero que mantiene la maneta y permite usarlo manualmente, pero ahora yo me doy cuenta que cuando lo probé ese sistema les dije precisamente ¡que podían haber eliminado la maneta!.

Me ha gustado mucho la Yamaha MT-09 2024, que no había probado todavía, y me ha gustado descubrirla a la vez que este sistema automático Y-AMT comprobando que no me "filtraba" sensaciones ni cuando rodamos en condiciones precarias (agua). Sí confieso que esperaba un modo automático más "cañero" todavía que ese “D+” pero tal como está no me parece mal: basta un toque a la piña derecha para pasar al modo manual y puedes sacar el partido que quieras, o sepas, de esta naked deportiva tan eficaz ¡Bienvenido Y-AMT!